Mi gusto es II

Así es. Decía yo en el post pasado que mi gusto musical, que es un cúmulo de géneros, es más una serie de eventos fortuitos que una enseñanza con maestro, y me dediqué a exhibir algunas vergüenzas musicales cuando me conformaba casi con cualquier cosa y no sabía nada de nada de la vida (ahora tampoco pero ya soy consciente de mi ignorancia, jeje).

Ahora, no vayan ustedes a creer que me limitaba a escuchar solamente lo que puse, es sólo que no quiero aburrirlos con tanto detalle. Por otro lado no aclaré a qué creo yo que se debe tanto desatino; y es que la diferencia tan notable que encuentro con otras personas es que yo no tengo hermano mayor y no me tocó escuchar lo que escuchaban los hermanos mayores, ni primos muy grandes o que yo quisiera emular, claro que emulé a otros personajes pero yo creo que agarré de tocho, jajajaja. Como no tenía una figura importante en la parte musical que me enseñara ‘el buen camino’ ni todo lo chingón que estaba pasando en ese momento (me refiero a los finales de los 70’s y toda la década de los 80´s) tomaba lo encontraba por aquí y por allá, pero eso no deja nada bueno, las estaciones de radio de Mazatlán (ya se imaginarán), los canales de taravisa (siempre en domingo, guácala, XETU, chale), y toda serie de cosas comerciales y pasajeras.

Como digo, no todo era malo. Debo a mi padre una buena parte de mi gusto musical pero no es que él me haya inculcado ningún tipo de música en especial, ni que se haya esmerado en transmitirme sus gustos, y además se lo agradezco porque en general pareciera que no congeniamos mucho, pero si me adentro a las raíces me doy cuenta que ahí está su herencia.

Mi padre no era muy rockero que digamos, mi madre dice que mientras otros escuchaban a los Beatles, a los Stones, o a Pink Floyd, mi padre era medio bohemio y escuchaba más bien música de trío, boleros, Marco Antonio Muñiz, Facundo Cabral, Alberto Cortez, Guadalupe Pineda, Eugenia León, Armando Manzanero, José Angel “El Cuervo”, Victor Iturbe "El Pirulí", etc. Música cubana, brasileña, y muchas cosas que encajan perfectamente en el lounge o easy listening. También mucha música clásica.

Soy una persona que tiende a ser melancólica (sin querer ser dramático, i’m no drama queen) y uno de mis recuerdos más fuertes eran los días nublados (me encantan), en carretera rumbo a la sierra de Durango, una curva tras otra, y mi papá con bossanova en el auto; siempre que escucho bossanova me teletransporto y me da mucha melancolía, o nostalgia no sé, pero me gusta mucho la clásica, la de Joao Gilberto, Stan Getz, Antonio Carlos Jobim, Sergio Mendes, Walter Wanderley y Vinícius de Moraes. Yo creo que todo lo que me hace sentir en el bossanova lo puedo resumir en la rola de Insensatez de Jobim, había una morra, Ale, que trabajaba conmigo en una agencia que siempre me reclamaba cuando la ponía porque decía que era muy triste, yo le decía que eso era lo que más me gustaba.

Pero bueno hay muchas que también son mis favoritas: corcovado, meditação, para machuchar, desafinado, samba de verão, que sabe voce de mim, só danço samba, mais que nada, ebony samba 1 y 2, samba triste, felicidade, y pa que negarlo, la garota de ipanema, etc.

Cómo olvidar también los domingos en los que mi padre nos levantaba con música clásica a todo volumen para bajar a desayunar (casi siempre le tocaba el desayuno los domingos), y le valía madre si alguno estaba desvelado o crudo, y si insistías en hacerte pendejo no faltaban las cosquillas en las plantas de los pies que hacían que te levantaras como resorte.

Y en general como dije, mucha música lounge, que tanto me late y que no es sino herencia de mi padre.

Pero bueno, en realidad a mí toda esa música de tríos y boleros y declamaciones y todo eso me recuerda cosas de mi infancia pero hasta ahí, no puedo decir que comparto ese gusto la neta, si acaso respeto y nostalgia por una época de mi vida.

Yo creo que todo empezó con el Mauro. Un primo que ni era primo pero que vivía aquí en Guadalajara y era hijo de un muy amigo de mi padre con cuya familia solíamos irnos de vacaciones casi a todos lados desde que tengo memoria, ya sea que ellos fueran a Mazatlán o que nosotros viniéramos a Guadalajara y de aquí a donde sea; Michoacán, Guanajuato, Chapala, Mazamitla, Tapalpa, Manzanillo, Santa María del Oro, Durango, etc.

Él es como un año más grande que yo y la neta es que yo sentía que éramos muy afines, nos gustaba mucho dibujar, pintar, leer (él es pintor de hecho) y de alguna u otra forma creo que influenció varios aspectos de mi vida los pocos días que nos veíamos al año.

Un día de vacaciones de verano, antes de entrar a 6º, íbamos en la combi de mi tío rumbo a la playa y el Mauro puso una rola que me fascinó, y nunca había escuchado algo parecido en español, era Persiana Americana. Me dijo que acá en Guadalajara todo mundo estaba escuchando Soda. Y no sólo eso, también traía un cassette que desde que escuché la primera rola me dejó impresionado, era Caifanes y Mátenme porque me muero, y el 'rock en tu idioma' había llegado para mí.

Y con esos dos pilares básicamente mi mente se abrió a otras cosas como Radio Futura, Miguel Mateos, Git, Enanitos Verdes, Duncan Dhu, Los Toreros Muertos, Neón, Los Amantes de Lola, etc.

Por otro lado, como comenté alguna vez en otro post, en la secundaria conocía a dos personas que también considero fueron claves para definir mi gusto musical; el Juancho y el Wico.
El Juancho por su hermano mayor y varios de sus primos que siempre le pasaron mucha música desde heavy metal o hard rock hasta new wave y todo lo que iba saliendo en el DF y Guadalajara sobretodo.

El Wico porque el wey era medio fresón y tenía acceso a MTV en la parabólica (aunque no paso mucho tiempo para que en el cable metieran el MTV y el VH1 gringo), pero sobretodo porque el wey iba a San Diego y Tucson a cada rato y siempre traía algo de Depeche, The Cure, Echo & the Bunnymen, Peter Murphy, Erasure, Morrisey, New Order, etc. Así fue como tuvimos acceso a cassettes y luego a Cd´s que ni de chiste vendían en Mazatlán, así como revistas de música, videos y conciertos (como el The Cure in Orange y el 101 de Depeche).

A mí en esa época me tocó ir 2 veces para allá y aproveché para comprar música que no encontraba en mi rancho y también pósters que colgaba en mi cuarto.

Cuando estaba en 1º en la secun el hermano mayor del Juancho era el presidente de la sociedad de alumnos, en prepa, y le tocó organizar un concierto de Caifanes en el estadio de la escuela. Todavía me acuerdo que un día que estábamos en el receso (ya no era recreo, ja) en la escuela, el Juancho nos dijo que Caifanes estaba haciendo la prueba de sonido y logramos colarnos por un pasillo que daba a un costado del estadio, y ahí asomados por los barrotes de una de las paredes observamos como ensayaban las rolas que iban a tocar ese día.

Creo que al Juancho el tocó convivir con ellos en su casa, porque los invitaron a comer, no estoy muy seguro. Lo que más recuerdo fue ver a Saúl Hernández en la prueba de sonido, en shorts, era muy alto (o es, quién sabe, no tengo idea), flaquísimo, con sus piernas de popote y casi transparentes. El concierto poca madre, la de Viento inolvidable como siempre. Pero según yo aún cuando no había salido todavía el EP de la Negra Tomasa tocaron esa rola y también la de Perdí mi ojo de venado, muy chingón la neta.

A Soda nunca lo vi en concierto, nunca se asomó por mi rancho y era muy chico para irme a otra ciudad a verlos, después tuve oportunidad cuando estaba estudiando acá pero como buen estudiambre no tuve lana para ir. Mi fantasía pubertina se cumplió el año pasado cuando estuvieron aquí en el 3 de Marzo. Para mí fue orgásmico, es lo que puedo decir. Canté de principio a fin, así de simple. Gracias totales.

También estando en la secundaria un día estando en la casa del Juancho el wey sacó un demo de una banda nueva que le había pasado un primo de Guadalajara, era Fobia. Llegaron a ser mi banda en español favorita. Son la banda a la que más conciertos he ido, unas 6 o 7 veces fácil. Esos sí iban casi desde que empezaron a mi rancho y hace poco todavía reviví viejos tiempos en su reencuentro, sí lo acepto fui víctima de la mercadotecnia nostálgica pero la neta suenan muy bien todavía, todos me laten pero para mí el Huidos es el que rifa ahí pa que nos hacemos.

A Caifanes me tocó verlos varias veces, su música y algunas de sus canciones fueron muy importantes para mí en una buena parte de mi pubertad y adolescencia, ir a sus conciertos era como un ritual con sacerdote integrado y toda la cosa. El que más recuerdo fue el de la gira en el que le abrió La Maldita. En esa época a la maldita sólo la había escuchado en cassettes mal grabados y en acetatos de corta duración pero nada más, no tenían disco todavía. Allá logró una base de fans, poquitos pero varios, porque fueron un año a tocar en un concierto gratuito en la Explanada Sánchez Taboada (donde están los clavadistas en Olas Altas) que fue parte del Festival Cultural de Sinaloa, en sus años dorados (Caifanes lo hizo un año antes, y Café Tacvba lo haría uno o varios años después, todos unos desconocidos).

Chale, y eso que omití muchos detalles, jajajaja.

Aquí le paro pero creo que esto continuará… algún día.

Ahí se ven perros.