Buen Fin (continuación)

Hola, haciendo limpieza de disco duro me encontré con la continuación de un post que dejé inconcluso desde Febrero... lo sé pero qué quieren que haga, tengo el cerebro frito. La primera parte está aquí.

Lo último que dije fue que ibamos a ver la peli El Descenso.

Mientras La Puchona se ponía de acuerdo con los roncos yo volteé a ver la reseña de reojo; alcancé a ver una foto donde se veían unas morras en el bosque con equipo para escalar… o descender, y ya no quise saber más.

Inmediatamente pensé en una película de trama ligera, con moraleja de superación personal… mmhm… ¡Ya sé, ya sé!... Un desastre (qué original). Las morras al borde de la muerte, una o varias mueren antes de salir vivas y, como es inglesa, seguro es la más puta por aquello del humor negro; si fuera gringa la muerta sería la chica mala. La o las morras más fuertes (si fuera gringa sería la buena) son las que se salvan. FIN.

Pensé que bueeeeeeeeeno, ¡total!, por lo menos no es gringa… y después las cheves.

Mientras la Puchona manejaba yo le di unos toques al rocket y como no había estacionamiento nos tuvimos que quedar como a una cuadra del Centro Magno, con todo y mi pata rajada. Ya cuando íbamos caminando me di cuenta que me sentía como en un sueño, no mames! Como dirían los charolastras ‘pura caquita de chaaaango…’ hacía mucho que no probaba una mota tan ponedora, jejeje y entre la pachequez y la pata ya para cuando llegué a la esquina parecía que había corrido un maratón.

Íbamos subiendo cuando vimos que el canhijo y la ronquis nos estaban viendo con cara de ‘ya ni la chingan, apúrense’ pero neta que por más esfuerzo que hacía no podía ir muy rápido. Ya cuando llegamos al 2º nivel andaba yo pero si entre las nubes; nos saludamos pero estuvo bien cagado (lo que hace la pachequez) estábamos platicando de mi pata y en eso avanzamos y veo que el canhijo saludó a la puchona y yo me quedé pensando ‘a qué maleducado soy’ y le planto un beso de saludo a la ronquis pero se me quedó viendo medio extraño y entonces le pregunto - ¿de pura casualidad ya te había saludado? - Simón - me dice y me boto de la risa, - perdón pero es que vengo bien motorolo -

Entramos a la sala y estaba llena, así que nos resignamos a la 3ª fila de adelante y nos dispusimos a ver la película que estaba recién comenzando. La película empezó muy bien; no se preocupen no les pienso contar… toda la película, nomás tantito.

Al principio hay una escena muy buena donde realmente te cagas de miedo, y ya para esta escena me quedé pensando que quizá no era la película que yo imaginaba; parecía todo un thriller pero todavía no estaba seguro.

Los primeros 45 minutos de la película todo iba muy bien: algunas emociones fuertes, muchas tomas con ángulos cerrados, poca luz, una sensación de claustrofobia y de incertidumbre un poco ansiosa, desesperante. Pero después la película se cae vertiginosa e irremediablemente hasta convertirse en un verdadero bodrio.

Hagan de cuenta que están viendo una fusión de 3 películas: imaginen a Uma Thurman en Kill Bill peleando contra Alien en los escenarios de Tomb Raider. Así de mamón.

Ok, ok. Tiene lo suyo, tampoco es que se parezca a La Risa en Vacaciones; el wey maneja muy bien la dirección de cámaras de tal forma que casi nunca puedes ver qué está sucediendo alrededor de la lente y te transmite la ansiedad que provoca estar en un lugar encerrado y a oscuras donde algo está sucediendo pero no sabes bien qué. Luego hace una toma de close-up y la música se escucha in crescendo hasta que te dan ganas de agarrarte del respaldo, arañar al de al lado y voltear para otro y ¡zas! casi hace que se te salga el chocorrol del empaque.

El pedo es que utiliza este mismo pinche recurso unas… veinte veces.

Ya para la décima ya te la sabes de memoria, y no, no es que ya no asustes sino que ya nomás estás esperando a ver qué mamada sale, y terminas pensando en ¡ya por favor! ¡ya estuvo bueno!, neta, ese pedo cansa.

Después de eso nos lanzamos al seven por unas chelas y estando ahí nos mensajeó la Doñis ‘quesque estaban en un evento muy chido en una terracita y quesque nos esperaban’… sí como no, primero muy misteriosos y luego ya ‘cáiganle’, nel, a ninguno se nos antojó.

Eso lo platicamos más tarde con los ronquitos y ellos también coinciden: uno entiende que cuando te invitan a algún lado y nomás te dan 2 pases pues ni pedo, no invitas a los demás pero tampoco te pones de misterioso con ‘tengo un compromiso’, porque suena a que no nos dicen por miedo a que les vayamos a rogar ‘llévame por favor’, no mames! ni al caso.

O por ejemplo: si nomás te dan dos pases y quieres checar primero para ver si puede entrar más banda pues ¿les dices, no? Algo así como ‘hey weyes va a haber este pedo, si se puede les hablo para se lancen’ y ya, con eso, uno ya sabe que si se puede pues chido si no nel, pero que te hablen a las quién-sabe-qué-horas para decirte que le caigas y tú andas todo pandroso porque no te la esperaba pues como que nel, te sientes como ‘el colado’ (qué sí lo eres pero ¿para qué recalcarlo?).

Antes de que me tachen de jarrito de tlaquepaque aclaro dos cosas: todos coincidimos en que la Doñis no lo hace con esa intención sino que peca de ‘prudente’ y ‘discreta’ (¡por favor! es la Doñis… ni modo que no) pero el pedo es que con esas mamadas lo hace sentir a uno así como ‘bueno, pues no fuiste invitado pero ándale pues, te doy shampoo’. ¡Chale!

Nota: Doñis si estás leyendo esto habrás de saber que la puchis me obligó a escribirlo, no te enojes por favor...

Empezamos la plática sabrosona, que los chismes de no-sé-dónde, que si fulana esto, que si fulano el otro y la neta se estaba poniendo chida la cosa. Las chelas corrían como agua y de repente la ronquis le dice al canhijo ‘ya diles’ y el canhijo ponía cara de ‘ohh estáte’ y yo pensando en que me iban a salir con un chismesote. Y luego al rato la ronquis otra vez ‘ya ándale ya diles’ y el canhijo pelaba los ojos. Yo ya me estaba esperando la de ‘Luke……………………. I’m you father’ pero nel, no decía nada; es más, como habíamos platicado de los weyes(as) que habían salido embarazados ya estaba pensando en que el canhijo se iba a sacar el ultrasonido de la manga, jejeje.

Nel, nada de eso. Como que se puso medio rojo y luego nos dice algo así como - es que ya ves como es uno de vanidoso, y el otro día googlé lo de canhijo y me encontré una página y que le hablo a la Ronca y le digo '¿adivina qué me encontré en internet? las patoaventuras del perro y la puchona... -

Yo cuando escuché eso casi se me atora la chela en el pescuezo... (en la madre) pensé mientras a la velocidad de la luz repasaba mentalmente qué tantas cosas había escrito del canhijo y la ronquis en el blog. (Chin y ¿si se me escapó algo que no debería?) (¿hablé mal de ellos en algún momento?)

Después el canhijo le dice - y nos balconean bien cabrón - (en la madre, ¿qué habré puesto?)

Al principio yo reía nerviosamente esperando el reclamo y pensando en cómo minimizarlo pero después me di cuenta que no les disgustaba la idea, es más, parecía que les había gustado.

Después la ronca me dijo que se le hacía poca madre lo de mi descripción y cómo hablé de la puchona, mientras la puchona pelabas los ojos (la puchona en ese entonces sabía que escribía pero nunca le había pasado la dirección ni le había platicado sobre qué...)

Luego me fui al baño y alcancé a escuchar que la ronca le decía a la puchona - es que no es nada cursi ni romántico pero todo lo que dice sobre ti es como decirte que te quiere un chingo... - y yo mientras meaba un poco más tranquilo.

Me contaron que por espacio de una o dos semanas el blog era tema constante de sus conversaciones; que llegaban a comer o de chambear comentando sobre lo que habían leído ese día, y que se la pasaban cagados de la risa. En resumen me dijeron que les había gustado mucho y yo me volé, jejejeje.

La neta sí se sentí chido (guay para mi amigo Rufus si es que algún día regresa por acá), pa' que negarlo, porque son tus amigos, te conocen y saben quién eres; en cambio en la amplia blogosfera ya no sabes qué pedo, como dice la NanaEquis 'no todo lo que lees, es...' (jajaja, creo que es la cita que más he visto escrita en la blogosfera). Este es un mundo de humos y espejo, es el juego de seducción (cálmate pinche Cerati).

Bueno, ya me desvié del tema. Platicamos un buen rato del blog y de los bloggeros, nos alcoholizamos un rato, fumamos otro, y nos reímos bastante. También me contaron por poco la Doñis se entera y que el chacalawer vió una vez un post en la pantalla de la ronquis, que se rió pero al parecer ni se enteró muy bien de quiénes estaban hablando. La neta es que este blog no es secreto, tampoco me molestaría que lo leyeran simplemente que desconozco cuál sería su reacción. Ellos son un poco reservados y discretos, no les gustan los reflectores aún cuando ni siquiera digo nombres reales, jejeje. Según yo el pelón si se ha dado sus vueltas ya, pero no me ha comentado nada así que no sé que opine.

Voy a postear más seguido sobre ellos, nomás los menciono pero nunca hablo de ellos, voy a balconearlos, total, nadie me quita lo bailado.

Ahí se ven perros.